domingo, 9 de agosto de 2009

El gato de Covarrubias /1

Aquella esperanza que cabía en un dedal, (*) 
No era tal, 
Sino un vientre de nube al que mirar, 
En su parto de tormenta, 
En cielos preñados de gritos y violencia, 
Los muros destilan sangre y muerte negras, 
Nada grave, 
Un incierto pasar sin posible redención, 
Que refracta en el azogue del absurdo, 
Y contempla el revés oscuro de su alma, 
Quizá tú estés allí desde el principio.

(*) Primer verso de “Sueldo” de”Poemas de la oficina (1953-1956)” de Mario Benedetti

Covarrubias 
6-9-2008 
LTLG

2 comentarios:

El maestresala dijo...

Sr Belidor :


Un gato gordo a estribor
un cadaver al poniente
exquisito en su dulzor
y en sus trazos dementes.



Ripio

Belidor dijo...

LTLG